8 de marzo. Día Internacional de la Mujer

08/03/2019

Actualmente se sigue asociando la industria de la automoción con el hombre. Sin embargo, las mujeres han representado y siguen representando un papel muy importante en la evolución de este sector. Y no solo como pioneras, sino como empresarias, ingenieras y, también, como inventoras.

 

A pesar de que la presencia femenina en el mundo del motor sigue siendo mucho más baja en comparación con la masculina, hemos querido rendir homenaje a aquellas mujeres que han dejado huella en esta industria, enfrentándose al sexismo, la desigualdad y la discriminación.

 

 

 

Dorothy Levitt y el retrovisor

 

Esta británica nacida en 1882/1883 logró el primer récord del mundo femenino de velocidad al alcanzar los 146,25 km/h. Ser la mujer más rápida del planeta en una época en que aún faltaban 66 años para reconocer el sufragio femenino como derecho humano universal no era fácil. Una de sus grandes aportaciones fue su libro dedicado al automóvil (‘The Woman and the Car: A chatty little handbook for all women who motor or who wants to motor), publicado en 1909, en el que aportaba una serie de consejos como el de llevar un pequeño espejo para ver el tráfico que había detrás de sus vehículos. Los constructores automovilísticos no introdujeron este invento hasta 1914. Dorothy también aconsejaba a las mujeres que viajaban solas de llevar un revólver con ellas.

Florence Lawrence y los intermitentes

 

Actriz nacida a finales del siglo XIX en Canadá, que no sólo triunfó en Hollywood sino que también fue una apasionada del motor. Con 300 películas en su espalda, invirtió su fortuna en coleccionar coches y modificarlos. Su habilidad la llevó en 1914 a diseñar un artilugio en forma de palo que se movía de forma intermitente para indicar a los otros usuarios de que el vehículo iba a girar. A ella le debemos los primeros indicadores mecánicos de dirección, que años más tarde pasarían a ser los intermitentes. Nunca patentó este invento, y desgraciadamente años después fueron desarrollados por los fabricantes sin tener que pagarle nada ni reconocer su idea.

 

Mary Anderson y el limpiaparabrisas

 

Anderson nació en 1866 en Alabama. Mujer inquieta, empresaria nata, observó en 1902 cómo los taxistas de Nueva York sufrían y se desorientaban con la lluvia mientras conducían. Tuvo la brillante idea de crear un dispositivo manual que se accionaba desde el interior para limpiar el parabrisas. En 1905 Anderson intentó vender los derechos de su invento a una empresa canadiense, y ésta consideró que no tenía el valor comercial necesario para ser vendido. En 1922, Cadillac se convirtió en el primer fabricante de automóviles que adoptó este invento como equipo estándar.

 

Margaret A. Wilcox y la calefacción

 

Esta mujer nació en 1838 en Chicago y fue una de las pocas mujeres ingenieras de su época. En 1893, con tan sólo 34 años, inventó el primer sistema de calefacción para vehículos, que llevaba aire caliente desde el motor hasta el interior. Su idea ha llegado hasta nuestros días convirtiéndose en los conocidos sistemas de climatización.

 

Nació en 1838 en Nueva York y es considerada una de las inventoras más relevantes del siglo XIX. Una de sus grandes aportaciones en el mundo del motor fue las válvulas de camisa, uno de los componentes clave para el desarrollo del motor rotativo. No solamente aportó ideas en el mundo del automóvil, también inventó la máquina para fabricar bolsas de papel en serie. De hecho, a lo largo de su vida, obtuvo 21 patentes y realizó unos 90 inventos.

 

June McCarroll y la línea divisoria

 

Enfermera y médica nacida en 1867 en Nueva York fue la mujer que pensó en dibujar una línea divisoria que permitiría circular a cada vehículo por su carril, evitando situaciones peligrosas. Según los registros históricos de Indio (California), tras un accidente en 1917 ella misma pintó esa línea cuando iba a atender a alguno de sus pacientes.

 

Nacida el 13 de febrero de 1840 en Alemania, esta emprendedora decidió sumarse a los esfuerzos de su marido, Adam Opel, invirtiendo 10.000 marcos para comprar una máquina de vapor que permitió a la empresa poner en marcha su producción. Tras el fallecimiento de su marido, la conocida como “Mamá Opel” tuvo que hacerse cargo y sacar adelante la empresa, convirtiéndose en la primera mujer fabricante de automóviles de 1895.

Fue una emprendedora que transformó la empresa en una moderna fábrica para producir automóviles, que acabaría triunfando en Europa y convirtiendo a Opel en una marca mundialmente reconocida. Fue, por tanto, la primera mujer fabricante de automóviles en 1895.

 

Madame Labrousse y Camille du Gast: primeras pilotos de carreras

 

Se acostumbra a asociar las carreras de coches mayoritariamente con el género masculino. Y sigue siendo así en la actualidad. Estas dos mujeres se convirtieron en las primeras pilotos profesionales de carreras en competiciones tan nacionales como internacionales. En 1899 Labrousse se convirtió en la primera mujer en participar en un carrera de coche. Disputó la París-Spa y acabó en la quinta posición en la categoría de tres plazas. Camile du Gast, en 1901, pasó a la historia como la primer piloto profesional de carreras, participando con su taxi en la París-Berlín.

 

Nacida en 1901 en Alemania siempre tuvo una especial afición por la conducción, hasta el punto de participar de incógnito en una competición automovilística en Essen. En 1927 ya había ganado 17 carreras compitiendo con hombres, y se consideraba una de las pilotos con más éxito de Europa. Ese mismo año, esta mujer fue la primera en dar la vuelta al mundo en un coche.

 

Bertha Benz y Emilia Pardo Bazán: primeras mujeres al volante

 

Nació en 1849 en Alemania. Aunque es conocida como la esposa del famoso fabricante de automóviles, Karl Benz, esta pionera es considerada la primera mujer que conducir un coche e hizo una viaje con sus hijos en 1888. 16 años más tarde, en 1904, Emilia Pardo Bazán fue la primera mujer española en tomar el volante de un coche.

 

Jutta Kleinschdmit: primera ganadora del Dakar

 

Jutta nació en 1962 en Colonia y el motor siempre fue su pasión y a sus dieciocho años se compró su primera moto. Estudió física y trabajó como ingeniera en el Departamento de Investigación y desarrollo de BMW hasta que decidió dejarlo para dedicarse profesionalmente a las carreras. Participó cuatro veces en motos en el Dakar, poniendo el dinero de su propio bolsillo. En 1995 decidió pasarse a los coches y en 2001 ganó el Dakar, convirtiéndose en la primera mujer de la historia en conseguirlo

 

Los años pasan y las mujeres siguen siendo una pieza clava en este sector. Estas dos mujeres, y muchas más, son muestra de ello. Mary Barra, nacida en 1961 en Michigan, desde el año 2012 ocupa el puesto de presidenta de General Motors. Linda Jackson, nacida en 1959 en Inglaterra, es la actual directora general mundial de Automóviles de Citröen.

 

Fuente:www.lavanguardia.com

Volver